¿Por qué es bueno ir a mi dentista antes de irme de vacaciones?
Con las vacaciones a la vuelta de la esquina debes programar tu visita al dentista antes de emprender tu merecido descanso. Pero, ¿por qué?
Estoy en medio de un tratamiento, ¿tengo que hacer algo?.
En caso que estés realizando algún tratamiento odontológico, de implantología, ortodoncia, periodoncia, etc, es fundamental tener una cita previa para ver qué pautas has de seguir durante tu estancia vacacional. Saber que el proceso médico va a seguir su ritmo de forma correcta para que a la vuelta no nos encontremos sorpresas es importante ya que, en caso contrario, puede suponer una gran perdida de esfuerzo y dinero para el/la paciente.
Así que no dudes en llamarnos por si tienes dudas antes de irte a la playa, montaña, a un caserío o a un iglú (es la mejor opción este verano). No te quedes con dudas de los pasos a mantener dependiendo del tratamiento que tengas en vigencia.
Pero y si hace poco me hice una revisión, ¿tengo que tener algo en cuenta durante estas vacaciones?.
Pues sí. Hay que estar al tanto de varios factores que pueden afectar a tu salud oral durante la estación estival.
- Cuidado con las alzas de las temperaturas. En la cavidad oral conviven millones de bacterias de forma natural. En condiciones habituales predominan las bacterias “amigas” manteniendo bajo control a las bacterias que producen patologías. Con el aumento de la temperatura y la deshidratación hace que este equilibrio se pueda alterar, incrementándose las bacterias patógenas responsables de la caries, enfermedad periodontal y la halitosis.
- La relajación de los hábitos de higiene oral produce un aumento del riesgo de desarrollo de caries, gingivitis y halitosis (mal aliento). Todxs queremos descansar y dejar a un lado las rutinas (incluso la dental) pero puede tener un coste para nuestra boca.
- Los helados, los alimentos y bebidas frías no suponen ningún problema para la salud oral en condiciones normales. Es cierto que algunas personas que ya tenían problemas de sensibilidad dental pueden ver aumentado o disparado el dolor como consecuencia de estos estímulos fríos. Pero no son los helados los responsables de ello; lo que hacen es evidenciar el problema que ya existía previamente. En estos casos hay que consultar con tu dentista para averiguar la causa y tratarla cuanto antes. Así que a la vuelta, llámanos para ver coger cita y poner fin al problema.
- Los cambios en la alimentación con un aumento de bebidas carbonatadas, alcohol, azúcares y un incremento del picoteo entre horas afecta no solamente a la salud bucodental, sino a la salud general. Favorece la desmineralización del esmalte, aumentando el riesgo de erosión, caries y sensibilidad dental. Una dieta inadecuada, máxime en una boca seca, también aumenta el mal aliento o halitosis.
5 tips para mantener nuestra boca sana en vacaciones.
Por lo tanto, después de leer estas líneas, la guía básica para mantener una boca sana durante el verano es:
- Seguir una dieta sana y equilibrada.
- Mantener una buena hidratación.
- Cepillarse adecuadamente los dientes.
- Limitar el consumo de bebidas y alimentos azucarados.
- Evitar el alcohol y no fumar (esto es todo el año).
Un consejillo extra:
Cuando comamos fuera y no tengamos la oportunidad de cepillarnos los dientes de forma apropiada (ya sabes que las quedadas aparecen cuando menos te lo esperas), determinadas medidas como enjuagarse bien con agua y masticar chicle sin azúcar durante unos 20 minutos pueden ser de utilidad. Sin embargo, estas medidas deben de entenderse como excepcionales porque nunca sustituyen la eficacia de un adecuado cepillado con pasta fluorada.
Vete de vacaciones con la seguridad de que tú sonrisa lucirá perfecta. Recorda que la salud bucodental es esencial en cualquier momento del año pero especialmente antes de irnos de vacaciones. Que nada borre nuestras sonrisas.
En caso que estés disfrutando de ellas, te esperamos a la vuelta 🙂
Fuente: Consejo de dentista